Un americano despierta sin memoria y hablando sólo sueco

Se hace llamar Johan Ek

Un americano despierta sin memoria y hablando sólo sueco

Michael Boatwright, que se identifica como Johan Ek | The Desert Sun

• LLevaba cuatro tarjetas que le identificaban como Michael Thomas Boatwright
• Era un aficionado de la historia medieval
• Actualmente no puede valerse por sí mismo, según asistente social

Michael Boatwright, un hombre de 61 años, tiene a los médicos en vilo después de cuatro meses estudiando su caso. El pasado febrero, Boatwright fue encontrado inconsciente en un motel de Palm Springs, California, sin memoria, hablando sueco y haciéndose llamar Johan Ek, según explica el diario 'The Desert Sun'.

Nada más encontrarle, la policía le trasladó al centro médico de Palm Springs donde, una vez despertó, comenzó el misterio. No recuerda nada de lo que le había pasado anteriormente y, aunque dice llamarse Johan Ek, llevaba encima cuatro tarjetas -entre ellas el pasaporte-, que le identificaban como Michael Thomas Boatwright.

Algunos funcionarios del hospital creen que Boatwright podría haber participado en un torneo de tenis de la ciudad, ya que encontraron una mochila con ropa de deporte y raquetas.

Aficionado a la historia medieval

Un mes más tarde de su aparición, los médicos le diagnosticaron amnesia global transitoria, que se trata de un síndrome poco común, con el que la persona pierde la memoria provocado por un trauma físico o emocional y que en ocasiones puede durar varios meses.

Tras una extensa búsqueda realizada por el personal médico y trabajadores sociales, la policía sigue sin poder concretar si su procedencia es Florida como pone en sus documentos de identidad.

Las autoridades finalmente han encontrado, en los registros públicos suecos, documentos que podrían certificar que Boatwright vivió en este país nórdico durante 1981 y 2003. Incluso algunos suecos le llegaron a identificar y definir como un americano con gran interés por la historia medieval. Olof Sahlin declaró para Associated Press que le conoció en 1985 gracias al interés que ambos compartían por la historia y le define como una persona "amable y simpática, aunque un poco reservado". También explicó que la última vez que supo de Boatwright fue en 1999.

La trabajadora social que asignada a este extraño caso, Lisa Hunt-Vázquez, declaró al diario 'The Sun' que Boatwright no puede valerse por sí mismo, ya que no recuerda como sacar dinero o coger el transporte público y tampoco recuerda a su mujer ni a sus hijos
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