Ribó (Compromis) se suma a la manifestación que reivindica los països catalans
El edil de Compromís procesionó por la mañana junto a la Senyera al igual que cargos de EU, que también fueron a la marcha vespertina
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El portavoz de Compromís en el Ayuntamiento de Valencia, Joan Ribó, tuvo ayer una agenda apretada. Por la mañana, la procesión cívica; por la tarde, la manifestación a favor del País Valencià. Ribó recorrió las calles del centro de la ciudad cogido a uno de los cordones que la Senyera mientras que por la tarde no tuvo problemas en ponerse detrás de la pancarta de Compromís en una concentración envuelo de banderas independentistas y cuatribarradas.
Otros cargos de la coalición optaron por no acudir a la manifestación de la tarde pero Ribó, que incluso hace unos días pidió ser el portador de la Senyera en la procesión, siempre que no tuviera que entrar en la Catedral, hizo evidente su presencia detrás de la pancarta de Compromís. Durante la manifestación por la calle Colón de Valencia se pudieron leer lemas como «Esborrem les fronteres. Construïm els països catalans».
El concejal de Esquerra Unida Amadéu Sanchis también hizo ayer la misma ruta que Ribó. Si por la mañana procesionó cogido a uno de los cordones de la Senyera, por la tarde se puso detrás de una pancarta de su partido en la que se podía leer: «Per la nostra llengua, per la nostra cultura, pels nostres drets, pel nostre País. Rebel.lat». Sanchis estuvo acompañado por la excoordinador de EU Glòria Marcos, por el diputado nacional Ricardo Sixto y por los diputados autonómicos Ignacio Blanco, Esther López y Marina Albiol.
En la marcha, en la que también estuvieron representados los Joves Socialistes, participaron partidos como la CUP y Solidaritat Catalana, el expartido de Joan Laporta.
La asistencia a la manifestación fue muy limitada. Tanto al principio de la marcha, en la plaza de San Agustín, como al final, en la de Alfonso el Magnánimo, se pudo ver cómo los signos catalanistas (varias cuatribarradas) ocupaban más espacio que los que los defendían. Parecía lo contrario en las casi dos horas que en las que los manifestantes intentaron ocupar la calle Colón.
Los enormes huecos que se crearon entre las distintas pancartas de sindicatos y partidos políticos permitieron a la Policía Local que, en algunas ocasiones, pudiera abrir el tráfico para que los coches cruzaran la manifestación. Los asistentes fueron a paso de tortuga para evitar que la marcha no durara menos de media hora. Al final de la misma, se leyó un comunicado firmado por las organizaciones que forman la Comissió 9 d'Octubre. Los mensajes no cambiaron. «Hay que respetar la doble denominación de valenciano y catalán», concluyeron tras una larga lista de reivindicaciones de «dignificación» del valenciano. Desde la organización se aseguró: «Tenemos el cambio político que queremos cerca».
El discurso se centró en criticar la política del Partido Popular, rechazar «los recortes en sanidad y educación que amenazan la dignidad del valenciano» además de pedir «una financiación justa en la que Fabra no se debe doblegar por Madrid».
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