CATALUÑA, ANTE EL DESAFÍO SECESIONISTA
José Antonio Blázquez, un empresario antiindependentista que tiene la patente de la estelada
ASEGURA QUE NO PERMITIRÁ SU PRODUCCIÓN, COMERCIALIZACIÓN O DIFUSIÓN
Madrid.- La estelada, símbolo del independentismo catalán, tiene dueño, pero no es un independentista, sino José Antonio Blázquez un empresario natural deCastellón de la Plana, que reside en una localidad de la Costa Brava, y que ha registrado su patente, de tal manera que cualquiera que quiera utilizarla tendrá que hacerlo con su consentimiento.
Según publica 'La Razón', Blázquez que se define como "español antes que nada", se dio cuenta de que la enseña independentista no estaba registrada, y puesto que no se trata de una bandera oficial -que no pueden registrarse- decidió hacerse con los derechos. En la página web de la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPC) puede verse que desde el 25 de julio de 2013 el diseño industrial de laestelada está registrado a nombre del empresario castellonense, que según la legislación vigente, tiene el derecho exclusivo a utilizarlo y prohibir su utilización por terceros sin su consentimiento, durante un periodo de 5 años, así como la opción de renovar dicho derecho cada 5 años hasta un máximo de 25. Por lo tanto, los productos que lleven inserta la estelada no podrán salir a la venta, salvo que los productores lleguen a un acuerdo, que se antoja imposible, con Blázquez.
José Antonio Blázquez comenta que ha recibido a través de un conocido bufete de abogados barcelonés que representa a varios hijos del expresidente de laGeneralitat, Jordi Pujol, una importante oferta económica, "de seis ceros", por la cesión del registro de la estelada, pero el empresario castellonense confirma que "la contestación ha sido un no rotundo".
Blázquez explica que como titular, "en principio, yo puedo prohibir su uso, pero tendría que ir un notario para comunicar que esa bandera no puede exhibirse y que tienen un titular", aunque reconoce la dificultad de llevar a cabo una acción de ese tipo. En caso de producirse, afirma: "Yo puedo poner una demanda y las consecuencias las determinarán en los juzgados". En el caso de los ayuntamientos catalanes que suelen colocar este símbolo en sus fachadas advierte que "se pueden acoger a que ellos la tenían antes de que yo registrara el diseño", pero una vez tengan conocimiento, "no pueden volver a ponerla sin mi autorización". "Y no se lo voy a autorizar", espeta.
> En la imagen, decenas de esteladas en una manifestación.
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