Un imán islamista advierte del 'castigo divino' a los fans de Elton John

Elton John, en un concierto. | Reuters

Un castigo divino pesa sobre los fans de Elton John. Al menos, eso piensa un imán de Tatarstan -una república rusa de tradición musulmana- quien este jueves ha instado a los fieles a no asistir a los conciertos en Rusia de la estrella británica, abiertamente gay, si no quieren recibir un "castigo divino".

"Lo único que podemos hacer como creyentes es instar a la gente a no caer en la tentación del mal y a no asistir a los conciertos de Elton John en Rusia, sobre todo su concierto en Kazan", la capital local, según ha declarado el imán Saïdjagfar Loutfoulline en una entrevista al diario Nezavissimaïa Gazeta.

"Los que asistan al concierto y los que se presenten sobre el escenario recibirán un castigo divino por haber participado en una reunión de la sodomía", ha añadido.

En un comunicado emitido en la web de la mezquita, este imán ha denunciado el posicionamiento del cantante con respecto a la comunidad homosexual. "Al igual que la cantante Madonna, preconiza la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo y condena en los medios los gobiernos de países que prohíben el orgullo gay", asegura.

Sodoma y Gomorra son "dos ciudades bíblicas legendarias que fueron destruidas por Alá por los pecados de sus habitantes: por las relaciones sexuales de personas del mismo sexo, por la homosexualidad. Y es de eso de lo que hace propaganda el célebre homosexual Elton John", prosigue.

Elton John actuará el próximo diciembre en Moscú y Kazan.

Situación en Rusia

La intolerancia hacia la comunidad homosexual se ha acentuado en los últimos años en Rusia, donde la homosexualidad era considerada un crimen hasta 1993 y como una enfermedad mental hasta 1999.

Las manifestaciones del orgullo gay son prohibidas habitualmente por las autoridades y disueltas sin contemplaciones por la policía.

En junio, el presidente ruso Vladimir Putin promulgó una ley que sanciona todo acto de "propaganda" homosexual ante menores. Los extranjeros se enfrentan a multas de hasta 100.000 rublos (unos 2.300 euros), hasta 15 días de detención y a la expulsión del país.

Numerosos defensores de los derechos humanos y personalidades públicas rusas y del extranjero han denunciado un texto que consideran homófobo, cuya vaga formulación permitiría procesar a una pareja homosexual por darse la mano en público.