Y dos multas de 693.000 euros él, y su exmujer a dos multas de 274.000 euros
Carlos Fabra, condenado a cuatro años de cárcel por fraude fiscal
La Audiencia de Castellón condena al expresidente de la Diputación por cuatro delitos fiscales
El procesado se declara "muy satisfecho" por la absolución del cohecho y tráfico de influencias
La Audiencia Provincial de Castellón ha condenado al expresidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, a cuatro años de cárcel por los cuatro delitos contra la Hacienda Pública de los que se le acusaba. La fiscalía Anticorrupción reclamaba ocho años de cárcel por estos cuatro fraudes fiscales por no declarar ingresos de casi dos millones entre 1999 y 2004, por lo que dio lugar un fraude de casi 700.000 euros. La Sala le absuelve de los delitos de tráfico de influencias y del cohecho. En total, Anticorrupción reclamó para el exdirigente popular una pena de 13 años de cárcel.
La Audiencia Provincial también ha condenado a su exmujer a dos años de prisión por otros dos delitos contra la Hacienda Pública. Asimismo, la sentencia dada a conocer este lunes absuelve al empresario que denunció a Carlos Fabra y a su exmujer de los delitos de cohecho y tráfico de influencias. El exsenador Miguel Prim también ha sido exculpado de tráfico de influencias.
En la última sesión del juicio celebrado en octubre, el ministerio público consideró probada la autoría de Fabra y recalcó las acusaciones de fraude fiscal: “No es un defraudador cualquiera, era presidente de la Diputación y mientras exigía impuestos él, por detrás defraudaba”.
El fallo que condena a Carlos Fabra por los cuatro delitos contra la Hacienda Pública destaca que “es incuestionable” que el ahora secretario general de la Cámara de Comercio de Castellón “era cabal y perfecto conocedor” de sus cuentas y de sus ingresos “realizados personalmente o por terceros”. También de su “obligación de incluir estas cantidades en la declaración de la renta”. “Que tal omisión no se debió a una simple ignorancia o descuido es algo tan evidente por incompatible con la actividad profesional desplegada por el acusado que es una hipótesis plenamente descartable; como lo es que no conociese sus ingresos o pensara que no tenía obligación de pagar el IRPF por las referidas cuantías”, recoge el fallo.
Para la Sala, la única exculpación aducida por Fabra es la no coincidencia de los números de los peritos judiciales con los peritos de su defensa, y éstos, “se han basado fundamentalmente en informaciones no contrastadas, sin soporte documental”.
El fallo estima que en estos cuatro delitos no se castiga la dejación en el pago de los tributos, sino “el presentarse ante la Tesorería Pública alterando los datos patrimoniales, ocultando parcialmente la estructura patrimonial del sujeto pasivo de los impuestos”.
Anticorrupción pedía dos años de prisión por cada uno de los cuatro delitos y reclamó que no se rebajara la pena. Sin embargo, la Audiencia Provincial ha estimado la atenuante de dilaciones indebidas y reducido a un año de cárcel la condena por cada fraude fiscal.
El expresidente del PP de Castellón también tendrá que pagar una multa de 693.000 euros e indemnizar a Hacienda en la misma cantidad. Su exmujer, mientras, deberá pagar 274.000 euros de multa y abonar esa misma cantidad a las arcas de Hacienda.
Diez años de instrucción
Carlos Fabra, al que el presidente Rajoy llegó a describir como "un ciudadano ejemplar", se sentó en octubre en el banquillo tras casi 10 años de investigación acusado de un delito continuado de tráfico de influencias, otro de cohecho y cuatro fraudes fiscales. El juicio se celebró tras una instrucción cargada de incidencias en la que el caso llegó a pasar por las manos de nueve jueces y cuatro fiscales. La Audiencia de Castellón aprecia en la sentencia la atenuante de dilaciones indebidas.
La causa se inició en diciembre de 2003 con la denuncia del empresario Vicente Vilar, que acusó a Carlos Fabra de cobrarle cantidades millonarias a cambio de favores políticos ante los ministerios de Sanidad y Agricultura para conseguir permisos de fabricación de productos sanitarios. Los magistrados han absuelto a los acusados de los delitos relacionados con el supuesto tráfico de influencias.
El procesado, satisfecho
Pese a la pena a cuatro años de prisión por fraude a Hacienda, el expresidente de la Diputación de Castellón Carlos Fabra se ha declarado "muy satisfecho" porque no ha sido condenado por cohecho y tráfico de influencias. Según sus palabras, la absolución de estos dos últimos delitos implica que en su actuación no hubo "corrupción".
En cuanto a la presentación de recursos al fallo, el expresidente ha dicho que tiene que estudiarlo junto a su abogado, pero que ya tenían previsto recurrir tanto al Tribunal Constitucional como al Tribunal Supremo si se daba esta situación de condena.
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