Los padres de la fallera mayor de 2011, inhabilitados por la gestión económica de su casal
La comisión les acusa de generar un déficit de 48.911 euros y los afectados dicen que no hay pruebas y que sufren una caza de brujas
La Junta Central Fallera, que celebró anoche su pleno, guardó para el apartado de incidencias una resolución de impacto: aprobó inhabilitar por tres años a Julián Caballero, presidente en 2013 de Carrera Malilla-Ingeniero Joaquín Benlloch; y a dos años a Maribel Molina, tesorera y a su vez esposa de Julián. Se trata de los padres de Laura Caballero, fallera mayor de Valencia de 2011. Junto a ellos, también por dos años a Luis Ángel Morán, contador.
La gestora de la falla denunció ante JCF que las cuentas de la comisión no estaban claras, presentaban un déficit de 48.911 euros, cuando en un principio habían declarado un cierre contable con superávit de 7.315 euros.
«En la asamblea nos dijeron que había beneficio de más de 7.000 euros y nos extrañaba la dinámica exageradamente de crecimiento. Fuimos al banco y vimos que había un saldo negativo. Luego hablamos con proveedores y, al parecer, se debían 17.000 euros a pirotecnia y otras sumas a empresas, como la orquesta. Calculamos lo que faltaba por pagar y lo que estaba pendiente de cobrar de subvenciones de JCF, y vimos un desfase de 48.000 euros», indica Fernando Zaragoza, presidente de la gestora.
Por su parte, Julián Caballero y Maribel Molina, padres de Laura Caballero, aseguran que como presidente «se vio forzado a dimitir por la presentación de una moción de censura» y aseguran que «no está probado que haya habido una mala gestión de cuentas ni un déficit de 48.000 euros». Aseguran que exigieron que se hiciera una auditoría externa «y ellos no han querido porque no quieren saber la verdad. No quieren poner medios para resolverlo, desde el principio no han querido aclararlo». Aseguran que sufren «una campaña para desacreditarnos, es un ataque personal, una caza de brujas».
Los progenitores de Laura comentan que están padeciendo desde marzo y que «se han acabado los desprestigios a esta familia. No descartamos ir a defender nuestro honor donde haga falta, incluso a la Justicia».
Por su parte, la gestora de la falla explica que están llevando este tema por tres vías: «En incidencias de JCF; la vía legal; y la de revisar las cuentas. Estamos en manos de un abogado y primero queremos llegar a soluciones amigables antes de ir a un juicio. Además, estamos mirando en una auditoria interna las cuenta de los últimos cinco años. No podemos tener auditoria externa porque los libros contables no son claros y hay apuntes en servilletas», añade Zaragoza.
Recurso
El matrimonio Caballero-Molina niegan estos datos y aseguran que recurrirán la decisión de JCF de inhabilitar tres y dos años a los afectados, que podrán seguir siendo falleros, pero no tener ningún cargo en la directiva ni representar a su falla en ningún acto organizador por JCF.
La falla gestora dijo anoche que tampoco estaban contentos con el fallo de JCF. «En aplicación del artículo 77 del reglamento fallero opinamos que debían de inhabilitarlo 15 años. Tampoco entendemos cómo nuestro delegado del sector, que acudió a una reunión de presidentes, ha podido votar en contra cuando aportamos documentación en una junta del sector», según Zaragoza.
El concejal de Fiestas, Francisco Lledó, llevó el tema a votación y dos delegados del sector, José Antonio Arenas y José Luis Pérez, dieron voto negativo, el resto lo aprobó. Arenas indicó que «se tiene que demostrar con pruebas». Por su parte, Lledó explicó que JCF «no entramos en tema económico porque no somos auditores. Entramos en una gestión que primero se planteó como superávit y luego de déficit. En función al reglamento, el presidente tiene la función de vigilar el presupuesto para evitar desfases y eso, según el reglamento fallero, es sancionable. Nosotros no entramos en el origen o causa. Incluso en reunión con incidencias, Caballero reconoció el déficit».
El concejal detalló que esta «no era la primera vez que se producen problemas entre falleros por déficits en cuentas». Detalló que «en ocasiones las comisiones elevan el tema a JCF y en otras no» y añadió que muchos presidentes se podrían ver en la misma situación».
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