En Canal 9 se hablaba en catalán…

Ya lo dijo José Císcar, vicepresidente y portavoz de la Generalitat Valenciana, sí, la nuestra… (aunque no sé si la de todos, visto lo visto): no son medios valencianos, ni emiten en valenciano ni lo hacen desde la Comunitat Valenciana. La cosa parece fácil, pero los de siempre se empeñan en que así no sea. Un enroque que viene de lejos y no por minoritario y alejado de las pulsaciones ciudadanas valencianas, sobrevive sin desfallecimiento alguno. A los lugartenientes del entramado edificado hace décadas por Eliseu Climent, con el principal objetico de la captación del riego de las subvenciones venidas de unas instituciones catalanas preocupadas exclusivamente de sus propios intereses internos… a saber Acció Cultural y cia, vemos como ahora undesnortado Comité de Empresa de RTVV se suma alegremente a una concentración que hoy se celebra en Valencia en defensa de los medios de comunicación que emiten en catalán en nuestra tierra, igualando Canal 9 a TV3 y Ràdio 9 a Catalunya Ràdio.

Si uno de los grandes problemas de nuestra televisión autonómica era la desafección que padecía de nuestra sociedad, esa que va desde Morella a Orihuela, con unos índices de audiencia bajo mínimos, sólo faltaba ahora, cuando estamos asistiendo a sus exequias e interminable funeral, en plenas honras fúnebres va y se destapa el órgano sindical de representación de los trabajadores de la extinta Radiotelevisión Valenciana apoyando una iniciativa en defensa del catalán en nuestra tierra, defendiendo la presencia de medios de comunicación catalanes en nuestro territorio, e incluso enarbolando la bandera, supongo que bien barrada, que en Canal 9 se hablaba en catalán.

Estos sindicatos de clase, por que más privilegios que estos trabajadores de la antigua televisión pública valenciana ostentaban era desconocido en cualquier otro ámbito empresarial, ya hicieron agua al intentar vender un clamor social inexistente en apoyo de sus reivindicaciones, fracasando en las movilizaciones por todas las comarcas valencianas o perdiendo los papeles instigando a nuestros representantes políticos. Y ahora se empeñan en tapar el desinfle de su presencia social arrimándose a la organización catalanista por excelencia en nuestra comunidad, enrolándose en la protesta por el cierre de las emisiones ilegales de Catalunya Ràdio en nuestras ondas. Y para más inri, defendiendo la presencia de medios catalanes en la Comunitat Valenciana.

Y han leído bien, las emisiones eran ilegales, desde repetidores ilegales edificados por ACPV y sancionados desde hace años por las autoridades competentes, precisamente por el Ministerio de Industria y el gobierno central. Lo mismo que sucedió con las emisiones de TV3 en la CV y lo mismo que sucedería con cualquier otro medio foráneo e ilegal. Cierto es que es faena de la Generalitat Valenciana, la nuestra no nos equivoquemos, solventar el mapa de las concesiones de TDTcomarcales y ordenar el panorama televisivo valenciano, así como conceder de una vez casi el centenar de frecuencias de radio para nuestra tierra que duerme en un cajón desde hace más de un lustro, pero también es su obligación velar por los intereses de nuestro territorio a todos los niveles y actuar contra intromisiones e ilegalidades, más aún si atentan contra nuestra identidad y cultura. Sí,la valenciana, que parece que los de siempre olvidan…

Así no, así no conseguirán que el pueblo valenciano vuelva a identificarse con la necesidad de una televisión propia. Que dios les conserve la vista y dejen de airear su nueva fe de converso visionario derribado de su caballo. Que perdida su credibilidad, a ver que les queda.

Borja Belloch