En la película de Isabel Coixet Mi vida sin mí, su protagonista, Ann(interpretada por Sarah Polley) recibía la noticia, tras una revisión médica, de que le queda poco tiempo de vida. En lugar de anunciárselo a su familia, decide ocultarlo y dedicar los meses restantes de su existencia a cumplir todo lo que aparece en su lista de “cosas por hacer antes de morir”, entre las que se cuenta buscar una nueva pareja a su marido (que, por cierto, terminará siendo la vecina, interpretada por Leonor Watling).
A muchos espectadores les pareció una historia bonita, aunque difícilmente aplicable a la vida real. ¿No resulta de una candidez extrema buscar pareja a tu marido, siendo consciente de que esa es la mujer que va a calentar cada noche la cama donde tú dormiste hasta que pasaste a mejor vida? No es lo que ha debido pensar una mujer enferma de cáncer terminal de Hartford (Connecticut), que ha publicado un anuncio en la página de anuncios clasificados Craigslist solicitando candidatas para ocupar su puesto tras su deceso.
“Me gustaría encontrar una buena mujer”
La mujer, que firma con el nombre de Sharon B., arranca dando las gracias por leer el mensaje y manifestando que era consciente de que se trataba probablemente del “anuncio más extraño que jamás leerás en CG”. El texto fue colgado en la página el martes y, desde entonces, ha corrido como la pólvora en los medios anglosajones, principalmente a la buena fe de su autora, que señalaba que buscaba, antes de morir, “una mujer maravillosa que merezca su atención”.
Tengo remordimientos de dejar sola a mi parejaSharon B. señalaba que su amante desconocía que estaba poniendo dicho anuncio, aunque probablemente, a estas alturas y tras haber sido publicado en medios de todo el planeta, ya debe saberlo de sobra. “Durante los últimos cinco años, he tenido una relación con un maravilloso caballero, ‘A’”, explicaba la mujer.
“Es amable, comprensivo, divertido y lo más importante de todo, muy atento a mis necesidades sexuales”. Sharon B. señalaba que había conocido a dicho hombre mientras tenía otra relación, pero que debido a que se trataba de una larga historia (y, sospechamos, bastante privada) prefería reservarse los detalles para más tarde, por lo que no queda claro de si aún mantiene la relación previa o no, aunque todo parece indicar que así es.
Un sustituto a las puertas de la muerte
Una petición ya de por sí bastante inusual a la que hay que añadir el poco tiempo de vida que la mujer afirma que le queda: “Me han diagnosticado recientemente un cáncer de páncreas. No me queda mucho tiempo”, señala en el mensaje. “Mi familia me ha ayudado mucho, pero uno de mis últimos arrepentimientos es que abandonaré a mi maravilloso compañero íntimo”.
Este hombre merece la pena de verdadPara concluir el mensaje, Sharon avisaba de que colocaría el anuncio en todas las categorías de Craiglist “que pudiesen dar lugar a respuestas reales”, y que animaría a su pareja a ponerse en contacto con las mujeres interesadas que respondiesen al mensaje y que ella considerase que le tratarían con el cariño que merece. Desde luego, Sharon es la mejor publicista de “A”, ya que volvía a insistir una vez más en la despedida del anuncio en que “merecía la pena”.
Auténtico o simplemente un hoax más de todos los que circulan por la red, lo que está claro es que la historia de Sharon B. nos ilumina un poco en la oscuridad que nos envuelve cuando sabemos que nuestro fin se acerca. La conciencia de nuestra mortalidad parece conducirnos a relativizar los viejos enfrentamientos y a desearle lo mejor a los que se quedan en este mundo. Si tan fácil es, ¿por qué no aplicamos estas lecciones antes de que sea demasiado tarde?