El cese del máximo responsable de la Comisaría General de la Policía Judicial (CGPJ) de la Policía Nacional, José García Losada, estuvo cerca de producirse en julio, pero el Ministerio del Interior lo pospuso tres meses. Hasta ayer. La noticia se conoció a última hora del jueves mediante una nota oficial que camuflaba la destitución en uno de sus últimos párrafos. Ahora, el cuarto policía encargado de asumir ese puesto en los 20 meses que lleva el Partido Popular en el poder será Santiago Sánchez Aparicio, quien ocupaba la dirección de la División de Formación y Perfeccionamiento.
La relación entre Losada y la cúpula del Ministerio del Interior se había deteriorado hasta el extremo en los últimas semanas, como informó el miércoles El Confidencial. El ahora excomisario de Policía Judicial pidió que se reconociera con la cruz al mérito policial con distintivo blanco a los agentes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) que investigan los casos Gürtel y Bárcenas dentro de su comisaría. Finalmente, recibieron la medalla, pero en contra de la voluntad del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, que se oponía a ese reconocimiento.
Una posición difícil   
Ese es uno de los motivos que ha influido en su cese. Losada ha sido el encargado durante 15 meses de dirigir las investigaciones vinculadas a dos procesos judiciales con gravísimas implicaciones para el mismo Gobierno que le eligió para desempeñar esa labor. Su posición era, como mínimo, delicada. El Ejecutivo siempre ha desmentido que haya presionado a los agentes que se encargan de esas pesquisas que tanto le inquietan para tratar de influir en su resultado, pero esas interferencias han existido y han recaído sobre las espaldas de Losada.
En su mayoría, esas presiones han procedido de los sectores del Partido Popular que esperaban que, una vez en el poder, las averiguaciones sobre su presunta trama de financiación irregular se diluyeran en un barullo de callejones sin salida. Sin embargo, la labor de las unidades a cargo del jefe ahora destituido no sólo no se detuvo, sino que experimentó un impulso con la aparición el pasado mes de enero de los papeles del extesorero del PP Luis Bárcenas. Con esas pruebas y otras que han ido apareciendo durante la instrucción del caso, la (UDEF) ha ido elaborando informes demoledores que han estado a punto de provocar la dimisión de algún ministro.
El informe sobre Ana Mato
El momento más tenso se vivió en febrero con el envío al instructor del caso, el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, de un informe de la UDEF sobre los presuntos regalos de lujo que habrían recibido de la trama Gürtel la ministra de Sanidad, Ana Mato, y su exmarido Jesús Sepúlveda, imputado en ese procedimiento. Las revelaciones no sentaron nada bien en amplios sectores de Moncloa y Génova, que esperaban mucha más benevolencia por parte de una Policía que presuponían neutralizada.
La ministra de sanidad, ana mato (efe)Después de ese informe han venido muchos otros que han permitido confirmar la veracidad de los papeles de Bárcenas, encontrar sus fondos, demostrar la existencia de donaciones presuntamente superiores a las legales, hallar ingresos injustificados en cuentas del partido y abrir líneas de investigación que podrían afectar a otros miembros del Gobierno y del PP. La aparición de nuevas pruebas el pasado mes de julio por el cambio de estrategia del extesorero reforzó aún más el papel de la UDEF en los casos Gürtel y Bárcenas. Algunos informes sobre esas pruebas ya han sido enviados al juez instructor, pero aún quedan otros por elaborar y todavía no se ha recibido todo el material procedente de comisiones rogatorias, que también tendrá que ser analizado. Ahora será otro comisario el encargado de gestionar esas investigaciones.
El reciente episodio de las condecoraciones ha certificado el cese de Losada. Sorprende por ser el tercer cese de la legislatura y porque eraperfectamente conocido por el PP antes de confiarle esa responsabilidad. De hecho, ya lo había ocupado durante el Gobierno de Aznar. El Ministerio del Interior lo repescó en julio de 2012 del Centro de Inteligencia contra el Crimen Organizado (CICO) para sustituir a José Enrique Rodríguez Ulla, destituido después de que se descubriera que agentes bajo su mando habían estado investigando un ático en Marbella vinculado con el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González.
Reacciones al cese
Jorge fernández díaz en comisiónJorge fernández díaz en comisiónFuentes oficiales de la Dirección General de la Policía Nacionalconsultadas por este diario aseguran que el único motivo del relevo al frente de la Comisaría General de Policía Judicial es la necesaria restructuración de la Junta de Gobierno del cuerpo, debido a una orden ministerial que busca “impulsar la cooperación internacional y mejorar las áreas de gestión interna”. Las mismas fuentes rechazan cualquier otra interpretación del cese.
No opina lo mismo el Sindicato Unificado de Policía (SUP), uno de los más beligerantes con la gestión de Jorge Fernández Díaz en el Ministerio del Interior. El SUP asegura que la destitución de Losada obedece a intereses políticos del PP, que intenta “teledirigir” las investigaciones de corrupción que le afectan, según recoge EFE.
Losada ha sido relegado a la jefatura de la División Económica y Técnica de la Subdirección de Logística de la Policía. El nuevo comisario general de Policía Judicial es licenciado en Ciencias de la Información y ha sido jefe de la Unidad de Análisis y Tratamiento de la Información.