BLANCA JARA Hija del director Antonio del Real

La actriz española que trabaja para el hijo de Bin Laden

• Desempeña funciones de marketing en su constructora Qatar Bin Laden Group

• Omar Bin Laden es el cuarto hijo del fundador de Al Qaeda

• "Me invitaron a un festival de cine en Doha y allí me conoció en la alfombra roja

• "Para mí él es una persona normal, inteligente... Fíjate que le definiría como muy pacífico"

Blanca Jara ataviada con la típica túnica islámica que la actriz colgó en su perfil de Facebook.

Blanca Jara (28 años) ha sido una presencia habitual de las sobremesas televisivas esta temporada gracias a Gran reserva: el origen, un serial en el que compartía protagonismo con Alberto San Juan, Pastora Vega o Silvia Marsó. Mientras las amas de casa la veían tras su mesa camilla, ella se encontraba en Doha (Qatar), vistiendo la tradicional abaya (túnica islámica).

Allí trabaja para el cuarto hijo de Osama Bin Laden, Omar Bin Laden, en su constructora Qatar Bin Laden Group. "Para mí él es una persona normal, inteligente, tranquilo... Fíjate que le definiría como muy pacífico", cuenta a La Otra Crónica la actriz, quien, a pesar de eso, reconoce que cuando le conoció sí sintió "un poco de susto".

La intérprete es hija de Antonio del Real, director de taquillazos comoCha cha chá o Desde que amanece, apetece. Estos días se encuentra en España rodando a las órdenes de su padre El clavo de oro, pero aún colabora con Bin Laden como asesora de marketing.

Y es que allí trabajo no le falta: la construcción de infraestructuras en Doha de cara a los Mundiales de Fútbol de 2022 costará unos 158.000 millones y su polémico jefe aspira a facturar unos 1.000 millones de euros. "Sí, es buena época para las empresas de construcción en Qatar y en año y medio llegará el momento de las empresas de servicios", confirma a LOC Blanca, quien, sin embargosigue empeñada en abrirse hueco en su faceta como actriz. "Para mí es lo primero".

Ella misma nos ha contado cómo llegó a formar parte del séquito del hijo del fundador de Al Qaeda. "Me invitaron a un festival de cine en Doha y allí me conoció en la alfombra roja. Pudimos conversar, porque yo hablo árabe, ya que mi mejor amiga es palestina. Él estaba preparando una película sobre su padre, y le interesaba una mujer actriz que hablara español y árabe", explica. La película no llegó a buen puerto, pero el flechazo deOmar Bin Laden (a la izquierda en la imagen) se convirtió en una "buena amistad".

Hace dos años, el empresario qatarí buscaba una constructora española con experiencia en infraestructuras para asociarse con ella. Entonces, volvió a pensar en Blanca. "Me pidió que comprobase las empresas con las que estaba negociando, si eran de fiar, que las estudiase. Me metí tanto que estuve viajando con él, en reuniones... Y, al final, me interesé por aquello". De hecho, ella ejerció de cicerone de Bin Laden en su visita a Asturias, donde finalmente cerró un trato con la constructora Coprosa.

En la prensa local asturiana se llegó a publicar que tenían una relación sentimental, algo que Blanca descarta. "Él es un hombre muy familiar. Le gusta estar tranquilo. A pesar de tener muchísimo dinero no hace ningún tipo de ostentación".

Lo cierto es que es tan familiar que incluso ha tenido dos esposas a la vez, tal y como permite la ley islámica. Omar Bin Laden saltó a los tabloides británicos en 2007 cuando se casó con la británica Jane Felix-Brown. Él tenía 29 años y ya tenía esposa y un hijo. Ella, 51, era abuela y se había casado en cinco ocasiones. Actualmente, ya se han divorciado.

Sin muchos lujos

Al igual que no le intimida trabajar con un Bin Laden, para Blanca vivir en Doha no es tan excitante como alguno pudiera pensar. Tampoco ha sufrido un shock cultural al integrarse en una sociedad tan diferente. "Yo viví durante un tiempo en Nepal colaborando con una ONG, así que estoy bastante acostumbrada a vivir en sitios muy diferentes. La vida allí no es tan lujosa como la gente puede pensar. Igual sí que tienes un finde más de lujo y, al siguiente, acampas en el desierto".

Allí Blanca lleva el velo "cuando tiene que llevarlo" pero, como dice, se trata de sentido común. "En una iglesia, aunque no seas creyente, no vas en minifalda, ¿no?". Por lo general se junta con amigos del trabajo y otros occidentales, ya que "ahora mismo somos casi una invasión allí".

Su idea es la de servir al hijo de Bin Laden, por lo menos hasta que se celebren los mundiales de 2022 («ya que he empezado este viaje, me gustaría ver cómo acaba la historia», explica) pero la actuación va a ser lo que primero en su vida. De momento, tiene que acabar el rodaje a las órdenes de papá del Real, con quien ya ha rodado títulos como La conjura del Escorial o Y decirte una estupidez, por ejemplo te quiero. Después le esperan otra película y una obra de teatro de las que aún prefiere no decir nada. Su propia historia junto a Bin Laden daría para un nuevo filme.