«El niño no paraba de gritar que su padre fuese a por él»
Los vecinos del matrimonio detenido por un presunto abandono relatan cómo vivieron el rescate del menor
Fachada del edificio donde ocurrió el suceso.
«El niño no podía gritar más, era imposible». Así se referían varios vecinos al suceso ocurrido el jueves en el barrio de Russafa, donde dos padres fueron detenidos por dejar a su pequeño de tres años solo en casa para irse a la discoteca. Los bomberos tuvieron que sacar de casa al menor que estaba a solas y no paraba de llorar. Según señalaban los vecinos ayer, el niño gritaba «papá ven» y llegaron a pensar «que les hubiese pasado algo a los padres porque esos gritos no eran normales». La Policía Nacional acudió y solicitó la ayuda de los bomberos. Primero pidieron al menor que abriera la puerta por dentro pero no podía, siempre según el relato de los vecinos. «Decía que no podía y que no llegaba, claro es muy pequeñín». Los bomberos acabaron sacándole por la ventana con el brazo elevador. Luego llegaron los padres asustados al ver que el pequeño no estaba y acudieron a la comisaría para preguntar, donde fueron detenidos, acusados de abandono y por hurto, ya que fueron identificados como autores de un robo en el local donde habían estado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario